Un nuevo proceso enfrentan en los órganos de control exfuncionarios de la administración de Daniel Quintero por un caso ya reseñado de presunta corrupción en su paso por la alcaldía de Medellín. Aunque data del pasado 13 de septiembre, este martes 5 de noviembre se conoció que la Procuraduría inició una investigación disciplinaria en contra de los exsecretarios Esteban Restrepo, María Camila Villamizar, Alejandro Arias y del exasesor de Asuntos Estratégicos Pablo Andrés Rojas.
De acuerdo con el auto que da inicio a la investigación, se busca determinar si los implicados incurrieron en una falta disciplinaria por hechos ocurridos entre febrero y noviembre de 2020, el primer año de gobierno de Quintero, por presuntos hechos de corrupción en Ruta N. Los datos que dieron origen a esta actuación del Ministerio Público fueron publicados en su momento por EL COLOMBIANO, a finales de octubre de 2023, cuando Juan Andrés Vásquez, exdirector de dicha entidad sobre presuntas solicitudes indebidas que le hicieron funcionarios de esa alcaldía y que rayan con la corrupción.
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Tras conocer la noticia que publicó este medio de comunicación, la Procuraduría dio inicio a una indagación previa, con la que logró recopilar algunas pruebas e identificar a los sujetos procesales, por lo cual ahora abre la investigación disciplinaria. Entre estas pruebas se encuentra la ampliación de testimonio, bajo la gravedad del juramento, de Juan Andrés Vásquez, quien fue uno de los primeros funcionarios de carácter técnico que nombró Quintero y que salieron casi todos por desencuentros con su forma de gobernar o porque él los sacó.
En resumen, lo que hasta el momento la Procuraduría ha logrado establecer como hechos disciplinariamente relevantes es que Esteban Restrepo, en ese entonces secretario de Gobierno de Quintero y ahora con un alto cargo en Ecopetrol; María Camila Villamizar, exsecretaria privada; Alejandro Arias, exsecretario de Desarrollo Económico y ahora concejal de Medellín; y el exasesor Pablo Andrés Rojas habrían utilizado sus posiciones en ese entonces para influir en la contratación de Catalina Maldonado Pineda, Germán Patiño Díez, José Fernando Piraquive Seligman, Sergio Pulido Tamayo, Ricardo Castro García, Fredy Leonardo Luna Molina, Luis Fernando Giraldo Suárez. Es decir, los funcionarios habrían presionado al exdirector Vásquez para que contratara a esas personas.
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Asimismo, la Procuraduría ordenó a la actual administración entregar alguna información relevante de esa época, y ordenó una inspección disciplinaria con apoyo de su Dirección Nacional de Investigaciones con funciones de policía judicial para que extraiga información de los equipos móviles de Restrepo, Villamizar, Arias y Rojas, con el fin de determinar si hay conversaciones de WhatsApp para la época de los hechos que validen las denuncias del exdirector.
Lo que en su momento dijo el exfuncionario es que le habrían solicitado sacar de Ruta N a personal técnico para incluir a los nombres mencionados, solo porque eran recomendaciones políticas. Cuando reveló el caso, dijo que todavía sin posesionarse lo inundaron con hojas de vida enviadas por Restrepo, Villamizar y Diana Osorio, la esposa de Daniel Quintero. Y afirmó que le dijeron que no importaba si no cumplían los requisitos para los cargos. Recuerda, por ejemplo, como en el caso de una de las hojas de vida que le enviaron para un cargo en el área financiera, cuando él le dijo a la secretaría Villamizar que la persona no cumplía con el perfil, “ella simplemente me dijo: ‘¡Hacé que cumpla!’.Además puede leer: Procuraduría investiga de nuevo a Daniel Quintero, esta vez, por no vigilar a sus secretarios
En reuniones, por WhatsApp, llamadas le habrían hecho una seguidilla de peticiones de este tipo frente a las que trató de hacerse el de la vista gorda, pero ahí habrían empezado a presionarlo para que cumpliera lo solicitado por los exfuncionarios y la exprimera dama. Otro de los datos reveladores que dio el exdirector es que el mismo Quintero le habría dicho: “Yo voy a ser Presidente de Colombia”, y que para eso era “muy importante la información, la data”, y le pidió que le ayudara “a comprar unas compañías que manejan Big Data”. Y el comentario empeoró cuando le dijo que él, el alcalde, quería comprar esas empresas pero no iba a figurar en ellas.
Finalmente, el exdirector salió, tras meses de las presuntas presiones, porque se negó a que en la entidad primaran los perfiles políticos sobre los técnicos. Luego, en los siguientes años de gobierno de Quintero, se demostró el mal estado en el que quedó Ruta N.
Ahora, en el auto que dio inicio al proceso en el Ministerio Público consta que los investigados también pueden rendir testimonio si así lo desean. La Procuraduría reiteró que hay beneficios en caso de una posible confesión o aceptación de cargos.