La comunidad indígena del Resguardo de El Volao, perteneciente al pueblo ancestral Zenú, radicó una demanda con la que busca restablecer sus derechos territoriales en la región del Urabá.
A raíz del acto judicial, presentado por abogados de la Dirección Territorial Apartadó de la Unidad de Restitución de Tierras, los indígenas víctimas del conflicto en esta subregión buscan que se les restituyan 1.019 hectáreas ubicadas entre los municipios de Necoclí y Arboletes.
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En dicho espacio habitan 3.080 indígenas que integran 976 familias zenúes, quienes han sido víctimas durante más de 30 años y ahora buscan, con el apoyo de la Unidad, la reparación integral de sus derechos a través de la restitución de su territorio y de medidas que garanticen la restauración de los daños sufridos.
El Resguardo Indígena El Volao está compuesto por diez comunidades Zenú, que han sufrido reclutamiento forzado, masacres, asesinatos de líderes, desapariciones, desplazamientos masivos, confinamiento, despojo y abandono.
Por eso, dentro de las pretensiones de la demanda se busca la puesta en marcha de una estrategia para la prevención del reclutamiento forzado de niños; medidas de protección para los líderes y las autoridades del resguardo; y la concertación de un plan integral para la búsqueda de sus desaparecidos en el conflicto.
El director territorial de la Unidad de Restitución de Tierras en Apartadó, José Alberto Kunzell, señaló: “con esta demanda, buscamos que los jueces otorguen la reparación integral a esta comunidad, cómo víctima del conflicto, y que la sentencia reconozca la formalización y los derechos territoriales”.
Para la líderesa Aida Suarez, la demanda es un hito: “es un día trascendental porque se ve el compromiso del Gobierno y de la Unidad de Restitución de Tierras para cumplirnos a los pueblos indígenas, que soñamos algún día ser reparados después de tantos años de olvido, de maltrato y de violación. Porque el territorio es la vida y lo fundamental para las comunidades indígenas”.