La muerte de Juan Felipe Rincón Morales –hijo del general William Rincón, inspector general de la Policía– es un hecho que varias autoridades tratan de esclarecer. Desde la Procuraduría General crearon una agencia especial para intervenir en este proceso penal.
El joven de 21 años falleció en medio de lo que hasta ahora parece un intercambio de disparos entre su escolta y otros ciudadanos que, supuestamente, pretendían linchar al hijo del general.
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Es que en el medio se conoció que Rincón Morales sostenía conversaciones sexuales con dos menores de 8 y 15 años a través de sus redes sociales. La familia de las niñas lo citaron en el barrio Quiroga, sur de Bogotá, y allí se originaron los hechos que desencadenaron en su muerte.
“La Procuraduría Delegada para el Ministerio Público en Asuntos Penales designó al Procurador 3 Judicial II de Bogotá como agente especial, este funcionario será responsable de supervisar y participar activamente en todas las diligencias relacionadas con el caso, garantizando un seguimiento constante en el desarrollo de la investigación”, aseguró el Ministerio Público en un comunicado.
Las intenciones con esta medida, argumentó la Procuraduría, es asegurar la transparencia y el cumplimiento de los derechos de todas las partes en este proceso.
Este martes se conoció que Andrés Camilo Sotelo Torres, un tío de las menores, fue imputado por la Fiscalía como presunto responsable de atacar con arma de fuego al hijo del general. Quedó vinculado a un proceso en el que se señala de cometer los delitos de homicidio doloso agravado, y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones. Los cargos no fueron aceptados.
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En medio del incidente, el presunto responsable resultó herido en una de las piernas, producto de la reacción del escolta del joven.
Debido a esa herida, Andrés Camilo será sometido a una cirugía, por lo que el juez de control de garantías suspendió la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento mientras se cumple el procedimiento y se garantiza su recuperación.