La enfermedad por cáncer es un mal que afecta duramente la salud de los colombianos. Según cifras del Instituto Nacional de Cancerología, el de pulmón se posiciona como una de las principales causas de muerte por esa enfermedad en Colombia y su incidencia sigue aumentando cada año.
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De hecho, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) señala que ese tipo de cáncer causa cerca de 5.000 muertes anuales en el país, con una tasa de mortalidad que se ha mantenido en aumento durante la última década.
El cáncer de pulmón es particularmente letal debido a que suele diagnosticarse en etapas avanzadas, según estima la Organización Mundial de la Salud (OMS). En este contexto, se conmemora en noviembre el mes de la concientización del cáncer de pulmón: una fecha para recordar a los ciudadanos las medidas de prevención de esta enfermedad y la importancia de participar en chequeos tempranos para reducir los riesgos de sufrir esta enfermedad.
Al respecto, el gerente de Red Médica emi Falck, Faculty Centro Entrenamiento CEMI para Colombia AHA, Alejandro Rivas, señala que “la falta de conciencia y de acceso a exámenes preventivos sigue siendo un gran obstáculo en la lucha contra el cáncer de pulmón. Es esencial que la población conozca los factores de riesgo y tome acción para prevenir esta enfermedad, ya que muchas de las causas son prevenibles”.
Existen varios factores de riesgo para la ciudadanía y que inciden en el desarrollo de este cáncer. Uno de ellos es el consumo de tabaco, un hábito del que la OMS estima que está vinculado al 80 % de los casos. En Colombia el consumo de tabaco sigue siendo un problema crítico, especialmente entre jóvenes, por lo cual dejar de fumar es el cambio más efectivo para reducir el riesgo.
Otro factor de riesgo es la exposición a altos niveles de contaminación en el aire —como los casos de ciudades grandes como Bogotá y Medellín—, que incrementa el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón. La calidad del aire en estas áreas se ha deteriorado en los últimos años, lo cual ha impulsado a las autoridades a fomentar el uso de transporte limpio y espacios libres de emisiones.
Así mismo, está la exposición de muchos trabajadores de industrias como la minería, la construcción y la manufactura, quienes están en riesgo por la exposición a sustancias cancerígenas como el amianto. Por esto, la Sociedad Colombiana de Neumología insta a las empresas a reforzar las medidas de seguridad en el lugar de trabajo.
Ante esto, el Instituto Nacional de Cancerología en Colombia destaca que las pruebas de detección —como la tomografía computarizada de baja dosis— pueden reducir la mortalidad en personas con alto riesgo.
Por otro lado, investigaciones del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos demuestran que mantener una dieta balanceada, rica en antioxidantes y baja en grasas procesadas puede contribuir a reducir el riesgo. La actividad física también juega un rol importante en la prevención del cáncer y otras enfermedades crónicas.
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