Un niño de 10 años falleció este fin de semana en el municipio de Segovia, Nordeste antioqueño, mientras se bañaba en medio de una fuerte tormenta que cayó en el municipio.
El hecho ocurrió en la vereda Rancho Quemado, una de las veredas más distantes del casco urbano, no solo en Segovia sino en cualquier otro municipio de Antioquia. Según atestiguaron sus familiares, el niño habría recibido una descarga eléctrica que lo dejó inconsciente de manera fulminante.Le puede interesar: Ojo con la tronamenta de estos días: Antioquia es el departamento con más víctimas por rayos en Colombia
Tras sentir el estruendo y el grito ahogado del menor, los familiares lo trasladaron hasta el hospital San Juan de Dios en Segovia, lugar al que llegó a las 8:30 p.m. del 1 de diciembre. Allí lo valoraron, pero por la gravedad de las heridas fue remitido inmediatamente a Medellín, la idea era que lo atendieran en el San Vicente, pero lamentablemente por la gravedad de las quemaduras y el tiempo que pasó desde el accidente la situación del menor se complicó rápidamente y finalmente murió en medio del traslado, cuando se encontraban en el sector conocido como Tigrito, en el corregimiento de Vegachí.
La propia Alcaldía de Segovia tuvo que descartar las hipótesis que comenzaron a circular sobre una supuesta lesión con pólvora, lo cual fue negado por la entidad municipal tras recibir la valoración por parte del hospital.
De todos modos, las autoridades anunciaron que abrieron una investigación para conocer en detalle qué fue lo que ocurrió y condujo a la muerte al niño.
La zona minera de Antioquia es una de las más propensas para descargas eléctricas y accidentes por los mismos. De acuerdo con un estudio de la Universidad Nacional, llamado Evaluación del riesgo por rayos para Colombia publicado en 2019, Antioquia es el departamento de Colombia donde es más posible morir por el impacto de un rayo. Este estudio consultó diversas bases de datos del Dane y determinó que en las dos décadas comprendidas entre 1997 y 2017, en el país se registraron un total de 1.313 muertes por rayos, esto significa un promedio de cinco personas fallecidas al mes.
Entre las recomendaciones más comunes para tener en cuenta en caso de tormentas eléctricas está evitar la práctica de actividades al aire libre, alejarse de pararrayos naturales como los árboles, no bañarse cuando caen rayos, pues las tuberías son conductoras de electricidad y en zonas abiertas acercarse a zonas cerradas o pequeños valles. Asimismo, desconectar los dispositivos electrónicos.Siga leyendo: Milagro en Concepción, Antioquia: un minero artesanal sobrevivió al impacto de un rayo