Este miércoles al fin serían expedidos los decretos que dan desarrollo al estado de conmoción interior que declaró el Gobierno Nacional ante la crisis humanitaria y de orden público en el Catatumbo, en Norte de Santander.
Por ello, una vez más el presidente Gustavo Petro convocó a su gabinete para darle las últimas puntadas a los documentos que materializarán la declaratoria y que, según el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, deberán publicarse en las próximas horas.
Recién este martes, en la plenaria del Congreso, el Ministerio de Hacienda explicó en detalle cómo se financiarán las necesidades que se desprenden de la crisis en la región de Catatumbo.
La premisa del Ejecutivo es recaudar, a través de medidas tributarias, $1,06 billones destinados exclusivamente a la atención de la situación en el nororiente del país.
De acuerdo con María Juanita Villaveces, viceministra técnica de la entidad, las fuentes del recaudo serán el IVA de 19 % a los juegos de suerte y azar virtuales con los que se espera recaudar $519.000 millones (siendo el rubro que más aportaría al recaudo); una contribución especial a las actividades extractivas del crudo y el carbón, que alcanzaría cerca de $214.000 millones y un impuesto de 1 % al timbre con el que se esperan recaudar $330.000 millones.
El impuesto al timbre se refiere a un gravamen a bienes y servicios prestados por el Estado como la emisión de pasaportes, las apostillas y legalizaciones, entre otros.
“Son necesarios recursos adicionales para responder a la conmoción. Estos no estaban contemplados en el Presupuesto General de la Nación de 2025, por eso se requieren nuevas fuentes de financiamiento”, dijo Villaveces.
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La viceministra también explicó que la aplicación de estas medidas de contingencia solo se extenderán por lo 90 días que dure el decreto de conmoción interior.
El decreto cobija a 11 municipios de la región del Catatumbo, además de los territorios indígenas de los resguardos Motilón Barí y Catalaura La Gabarra, así como el área metropolitana de Cúcuta (conformada por Villa del Rosario, Los Patios, El Zulia, San Cayetano y Puerto Santander) y las poblaciones de Río de Oro y González, en el departamento del Cesar.
Se trata de poblaciones que se han visto afectadas de manera directa o indirecta por la ola de violencia a causa de los enfrentamientos armados entre la guerrilla del ELN y las disidencias de las extintas Farc.
El Ejecutivo señaló que esta medida excepcional se adoptó, entre otras, ante la necesidad de “recurrir a recursos fiscales extraordinarios” para financiar acciones que le permitan a las autoridades restablecer el orden público en la zona y para proyectos de inversión social, de infraestructura, salud, educación y ordenamiento territorial, entre otras.
Entre los argumentos expuestos por el Ejecutivo para la declaratoria de conmoción interior está la necesidad de “recurrir a recursos fiscales extraordinarios” para “financiar, por una parte, las acciones y capacidades de la Fuerza Pública para el restablecimiento del orden público”.