El nombramiento del general Pedro Sánchez como nuevo ministro de Defensa ha sido calificado por expertos como una medida improvisada del presidente Gustavo Petro, ya que podría provocar la salida de más de 30 oficiales, quienes no pueden ostentar rangos superiores al nuevo jefe de la cartera.Le puede interesar: General Sánchez confirma que este jueves será su último día como militar activo, al asumir como ministro de Defensa
La situación, considerada grave en medio de la crisis de orden público que enfrenta el país, ha generado preocupación por la posible renuncia de altos mandos, incluido el comandante de las Fuerzas Militares. Por eso, para evitar un “efecto dominó”, el general Sánchez habría decidido anunciar su retiro antes de asumir el cargo.
Sin embargo, el panorama sigue siendo complejo. El exministro de Defensa Juan Carlos Pinzón advirtió: “Esta designación da la impresión de no representar una oportunidad de progreso o avance, sino que es más deterioro y debilidad para las Fuerzas Armadas”.
Pinzón planteó dos escenarios tras la llegada de Sánchez: “Si asume en servicio activo, más de 20 oficiales generales y de insignia tendrían que pasar a la reserva. Pero si pasa al retiro, habría un período de tres meses antes de su posesión, lo que, según Pinzón, evidencia una “absurda improvisación en un momento crítico para la seguridad de los colombianos”.
Desde hace más de tres décadas, tras el mandato del general Óscar Botero Restrepo (durante el gobierno de César Gaviria), no se veía un uniformado activo en propiedad al frente del Ministerio. Si bien hubo encargos de miembros de las Fuerzas Militares durante los gobiernos de Álvaro Uribe e Iván Duque, generalmente los jefes de ese despacho eran civiles.En otras noticias: Sacudida en la cúpula de la Policía: más de 60 oficiales fueron llamados a calificar