No se ha estrenado en el cargo y al exsenador de Bogotá, Antonio Sanguino, fiel escudero de la exalcaldesa Claudia López y ahora designado ministro del Trabajo del presidente Gustavo Petro, le recuerdan una investigación por hechos de corrupción, que ya tiene un escrito de acusación en su contra. La investigación en contra del exsenador es por los delitos de tráfico de influencias y cohecho. Aparentemente, ocurrió durante la administración del fallecido exalcalde de Bogotá, Samuel Moreno.La denuncia en contra de Sanguino advierte que trató de influenciar, incluso presionar, por el nombramiento de una cuota política en el hospital de Usme.En el escrito de acusación en contra del exsenador también aparece su presunta relación con hechos corruptos durante la administración del exalcalde Samuel Moreno y principalmente con quien se desempeñó como secretario de Salud, el condenado Héctor Zambrano. Todo forma parte de una investigación que ahora busca espacio en un juicio.“Los elementos de prueba indican que, entre 2008 y 2011, mientras hacía parte del cabildo distrital, habría intercedido ante el entonces alcalde de la ciudad y el secretario de Salud de la época, para que nombraran a una persona de su confianza en la gerencia del Hospital de Usme”, explicaron fuentes cercanas al proceso.La Fiscalía hizo la imputación de cargos por los dos delitos y en octubre del año pasado y enero de 2025, radicaron formalmente el escrito de acusación en contra del ahora designado ministro del Trabajo. Una situación que parece bastante compleja en un gobierno que prometió ser el “cambio” y eliminar cualquier atisbo de corrupción. Si bien la investigación en contra de Antonio Sanguino y la misma imputación se mantuvo bajo reserva, su designación como ministro del Trabajo en el gobierno del presidente Gustavo Petro revivió el interés del proceso en su contra y por hechos de corrupción, tanto que ahora recuerdan todos los escenarios de la denuncia en su contra y las implicaciones legales que tiene. “En octubre de 2024, un fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción presentó ante un juez de control de garantías al exconcejal de Bogotá, Antonio Sanguino Páez, y le imputó el delito de tráfico de influencias de servidor público, cargo que no fue aceptado”, señaló una fuente de la Fiscalía.En criterio del ente acusador, también existen las evidencias necesarias para advertir que el también exconcejal asistió a reuniones en las que se habló con contratistas para la adjudicación de un proyecto de construcción y adecuación de una nueva sede para el mismo Hospital de Usme, por un valor superior a los 15 mil millones de pesos.“Por ese direccionamiento ilegal se habría acordado que el oferente beneficiado entregaría una coima equivalente al 10 % del valor total del contrato”, advirtieron las fuentes cercanas a este proceso, que también confirmaron la negativa del ahora designado ministro del Trabajo, de aceptar los cargos imputados por la Fiscalía.
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