La historia de Boyacá se ve reflejada en sus pueblos. Cada uno de los municipios de este departamento guarda una gran historia, tradición y belleza arquitectónica y natural que resultan imperdibles si se piensa en viajar a esta región del país, ya sea en un plan de fin de semana o en unas vacaciones.Los hay de todos los colores y para todos los gustos, Uno de ellos es Iza, que está ubicado cerca a Tunja. El Sistema de Información Turística de Boyacá (Situr) indica que su nombre proviene de la palabra chibcha ZA que significa noche, interpretada por otros investigadores como “Tierra de curación”.Actualmente, es reconocido como “Nido verde de Boyacá”, nombre que le otorgó Manuel Ancizar, quien hacia 1850 recorrió la región en calidad de secretario de la Comisión Corográfica dirigida por Agustín Codazzi. En su obra Peregrinación de Alpha por las provincias del norte de la nueva granada en 1850-1851, Ancizar se refiere a Iza con el mencionado nombre, en alusión a los sauces, alisos, chicalás y demás vegetación que daba un entorno natural al centro urbano.Iza es un pueblo acogedor, en donde destaca su centro histórico, sus bellos paisajes rurales y montañosos, y sus ricas tradiciones campesinas. Información de Fontur indica que su arquitectura es uno de los grandes atractivos. Por ejemplo, en el centro del pueblo se encuentra la iglesia y la casa de la cultura, entre otras edificaciones que le otorgan unas características particulares, pues en todo el municipio se mantienen las construcciones con estilo colonial.El portal Boyacá Turismo indica que en este destino se conserva el arte rupestre, los mitos, las leyendas, las tradiciones y festejos que lo hacen único. Además, sus habitantes se dedican a oficios como el tejido en algodón y lana, utilizando prácticas y telares de la España medieval.Así mismo, es un lugar al que se le reconoce por su tranquilidad. En esta población, los visitantes pueden disfrutar de sus aguas termales, sus deliciosos postres tradicionales a base de frutas de la región, y rutas de senderismo y ciclismo que permiten explorar sus alrededores y el Lago de Tota.Cueva de BochicaQuienes decidan ir a este municipio boyacense, tienen la posibilidad no solo de probar sus postres, sino también de realizar algunos planes que resultan imperdibles. Uno de ellos es ir a la cueva de Bochica, un lugar con un gran valor cultural, ya que allí, según las creencias ancestrales, este Dios les enseñó a los hombres el arte de hilar algodón y lana.En Iza también hay sitios en los que los viajeros tienen la posibilidad de realizar camping, además tiene oferta de establecimientos de glamping y parques ecológicos.De igual forma, se puede visitar el alto de vita, situado al occidente del municipio, desde donde se divisan varios pueblos vecinos y se admira de manera especial el valle de esta región.De su gastronomía, se dice que hay platos muy especiales como, por ejemplo, el mute que puede ser de maíz pelado o de mazorca y dentro de sus ingredientes incluye trozos de pata, de res o de cerdo y es un plato que se degusta en otras zonas de Boyacá. En cuanto a bebidas está la chicha, que es producto de la fermentación del maíz, principalmente.Iza forma parte de la Red de Pueblos Que Enamoran desde el año 2021. Esta es una iniciativa que lidera el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo que busca visibilizar destinos turísticos que tradicionalmente no han sido protagónicos, pero que cuentan con atractivos singulares y característicos que los hacen únicos.